Esta tendencia actual de conservar el medio ambiente, de adquirir muebles en vendimias (vintage) y plasmar identidad propia a los muebles que decoran nuestra morada ha dado lugar a nuevos proyectos empresariales y nichos de mercado. Más aún, hoy en día vemos estos diseños redefinidos en Ferias Internacionales como la ICFF de Nueva York y muy pronto en la Ecostyle de Frankfurt.
Algunos ejemplos:
El artista canadiense Gilbert VandenHeuvel creó la línea “The Recycler” con la que se presentó en la feria de Nueva York en la pasada primavera. En la imagen superior la silla 3R: Reusar, Reciclar y Relajar; su elemento básico es la utilización del plástico neumáticos de motocicleta que forma el asiento y el respaldo.
Esta silla tina, está hecha de tubos BMX con un estilo sesentero, las bandas del siento son también de llantas de motocicletas coloreadas con pintura en polvo.
CORNAMENTAS URBANAS
El mismo autor, VandenHeuvel, ha recuperado asientos de bicicletas y sus manubrios para armar tradicionales cornamentas.
Éstas pueden montarse sobre la pared a partir de una lámina metálica y tornillos que las soportan.
Por su parte, en Alemania la primera edición de Ecostyle nos dejará ver un repertorio de mobiliario de piezas que conjunta la idea ecológica de reutilizar la madera de pallets y el diseño contemporáneo. Veremos objetos de la firma Kimidori como la cajonera de la imagen superior.
La empresa italiana 959 recicla la cinta de los cinturones de seguridad; realizan desde cinturones de vestir, gorros impermeables, tapetes o lámparas:
La empresa inglesa Ashortwalk recicla, bajo el conocimiento que cada 8 meses, en el Reino Unido se producen suficientes residuos para llenar el lago Windermere, el más grande de la isla británica. Así que sus productos de la línea de interior son hechas a mano con tazas de café desechables.
Como este reloj de cabecera